Logré vincular el aula y la comunidad rural a través de expediciones que marchaban tras la huella de la cultura local en tertulias de lectura que se convirtieron en lugares de encuentro entre los padres, los hijos, los textos y la escuela.
Escribo estas líneas porque siento que la suerte del país está en nuestras manos, los maestros, los que le apostamos al poder transformador que tiene la educación.
ADN de los maestros: formar individuos integrales y competitivos para la toma de decisiones asertivas que lo lleven a conformar una sociedad armónica y justa.
Un maestro cordobés, una institución pública de Arauca y una institución privada de Bogotá fueron los galardonados con el premio Constructores de País Colombia2020 que entrega El Espectador.