Los estudiantes, docentes y padres de familia viven la transformación de la escuela como una crisis que cada uno enfrenta desde sus propias perspectivas.
Ver la labor educativa como el mapa de un tesoro en el que el amor es la brújula, permitirá que historias como la de Sonya Romero, y la de miles de maestros trasciendan las circunstancias e impacten vidas.