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Educamos para el presente y para el futuro. ¿Cómo será el futuro?
Los equipos conformados con personas diferentes funcionan mucho mejor que aquellos en los que sus miembros tienen todo en común.
Educamos para el presente y para el futuro. ¿Cómo sera el futuro?, es la pregunta que muchos maestros, directivos docentes y formuladores de politicas públicas tratan de comprender para adaptar los planes de estudio a la preparación de los estudaintes no solo para el hoy sino para el futuro. La Fundación Cotec[1] para la innovación es una organización privada sin ánimo de lucro cuya misión es promover la innovación como motor de desarrollo económico y social, nos brinda algunas pistas la vida en el futuro.
Para determinar como estará o será la sociedad en el futuro, es necesario remontarnos al pasado, es decir revisar la historia de la humanidad, según algunas cifras la sociedad mundial ha mejorado en varios aspectos, por ejemplo: en 1960 el porcentaje de las personas que vivian en pobreza extrema, en el mundo era el 60 % mientras que hoy en día es del 10 %, en 1960 el 53 % de los seres huamnos habían recibido una educación básica mientras que en el 2020 esa cifra paso al 86 %. Por lo que En el futuro seguramente estaremos mucho mejor que ahora.
Sin embargo, a pesar de estos avances, existe un pesimismo social que hace pensar que estamos peor que antes, eso se explica, porque el cerebro humano les pone más atención a las noticias negativas que a las positivas, como podría ser el caso de las actuaciones incorrectas de algunos miembros de la policía, médicos, abogados, sacerdotes, maestros, etc.
¿Cuál es la causa de estos importantes avances?
La respuesta la encontramos en las llamadas revoluciones industriales, así: en 1820 el uso de los motores a vapor, en 1880 el comienzo del uso de la electricidad industrial y en 1960 el nacimiento de los computadores y/o ordenadores.
En un principio, un artesano hacia todo el proceso: diseñar el producto, conseguir insumos, fabricarlo, venderlo, cobrarlo, etc. posteriormente cada etapa del proceso se fue especializando, logrando una producción más rápida con ayuda de las máquinas, lo que hizo que los precios bajaran y se volvieran más competitivos, lo que genero mayor producción, mayor consumo, más empleo, menos pobres y más clase media.
Frente al panorama anterior es que surge la deslocalización, que no es otra cosa que llevarse las fabricas a los lugares donde la mano de obre es más barata, logrando que paises en desarrollo disminuyeran los indices de pobreza extrema y que los países desarrollados al perder esos empleos se concentrarán ya no en la producción sino en la prestación de servicios, tales como el turismo, la banca, la salud, el transporte, la recreación, el comercio en tiendas, etc. que requieren de la contratación de bastante personal.
Es así como surgen muchas fuentes de trabajo especializadas y la clase media en desarrollo, que la componen contadores, abogados, diseñadores, conductores, operarios, administradores, vendedores, ingenieros, asesores, auxiliares, entre otros.
Es así, como a finales del siglo XX y principios del XXI, llega la cuarta revolución industrial donde las máquinas mejoran y los robots comienzan a reemplazar a los humanos en las fabricas, pues las máquinas hacen mejor los trabajos repetitivos y especializados, con la ventaja de que no hay que pagar salarios y no descansan. Asi mismo, surgen las aplicaciones que procesan datos y permiten conocer donde estamos, que compramos, que leemos, con quien nos relacionamos, que hablamos, que vemos y hasta cuanto tiempo estamos conectados.
Es por esto por lo que sabemos, que el 36 % del trabajo actual es repetitivo, por lo que lo pueden hacer mejor los computadores y los robots, en lo que conocemos como la automatización del trabajo, por lo que desaparecerán. Vendrán seguramente nuevas formas de trabajo y de prestación de servicios, que requieren de altos niveles de estudio y serán bien remunerados, pues el otro tipo de trabajos será precario, temporal, sin posibilidad de mejorar y mal remunerado. Divideindo otra vez la sociedad entre ricos y pobres.
Por lo que un sistema educativo y un maestro cuya base es la memorización, la repetición, la especilidad en una cosa y el cumpliminto de ordenes, esta formando para el trabajo precario y en todo aquello que puedde hacer mejor un computador. En otras palabras, esta preparando a sus estudiantes para los trabajos que van a desaparecer.
Hoy en día, sabemos mucho más acerca de las funciones del cerebro, la neuropedagogía empieza a estudiar el cerebro humano como un órgano social capaz de ser modificado por los procesos de enseñanza aprendizaje y para lograrlo sabemos que se debe estimular, los mejores estímulos son las emociones, como la sorpresa, la felicidad, etc. también sabemos que los equipos conformados con personas diferentes funcionan mucho mejor que aquellos en que sus miembros tienen todo en común. Igualmente conocemos que los humanos podemos actuar frente a lo imprevisible, podemos improvisar, cruzar materias diferentes, como puede ser la combinación de la cocina, con la química y el arte, como lo vemos hoy en día en algunos restaurantes y en la propuesta STEM de trabajar varias asignaturas en un proyecto para resolver problema y que podemos formarnos para pensar críticamente, actividades todas estas que las máquinas no pueden lograr.
Es por esto por lo que la educación y los maestros deben hoy en día cruzar asignaturas, motivar la resolución de problemas en sus salones de clase, formar en el manejo emocional propio y en el de la comprensión del de los terceros, fomentar la creatividad, el pensamiento crítico y conformar equipos de trabajo con personas diversas donde se complementen unos con otros, sí es que quieren formar para el presente y el futuro inmediato.
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