El desafío de educar a los niños en ausencia de escuelas debido al coronavirus

El COVID-19 se ha infiltrado en muchos aspectos de nuestras vidas, uno de los cuales es el sistema educativo en todo el mundo. La mayoría de los gobiernos han cerrado temporalmente las instituciones educativas en un intento por contener la propagación de la pandemia y no hay un calendario actual de reapertura.

Mientras están en casa debido al coronavirus, los padres pueden estar preocupados por el futuro educativo de sus hijos y el efecto de faltar a la escuela. Las escuelas están tratando de realizar algún aprendizaje en línea, para eso cuentan con padres capaces de supervisar a los niños. La mayoría de los padres ahora son responsables de la educación de sus hijos.

El profesor Becky Francis, del instituto de la educación del UCL, definió la educación en casa como “estimular a los padres a ayudar a sus niños a crear rutinas y hábitos regulares del estudio”. Previamente, las escuelas tenían la costumbre de compartir con los padres una parte de la responsabilidad de educar y de criar a los niños. La situación es diferente ahora y toda la tarea se atribuye solamente a los padres. 

Éstos hacen frente a muchos problemas y desafíos al ejecutar esta tarea. ¿Repentinamente, los niños están en casa y usted debe comenzar a educarlos sin ayuda? https://www.monitordooriente.com/category/coronavirus/

La organización de las Naciones Unidas para la educación, la ciencia y la cultura (la UNESCO) dijo: “estos bloqueos nacionales están afectando el casi al 98.5% de la población estudiantil del mundo. Actualmente, afectan a aproximadamente 1.725 mil millones de alumnos a causa del cierre de escuelas en contestación a la pandemia, 156 países están poniendo bloqueos en ejecución en todo el país y 29 están poniendo bloqueos locales en ejecución”.

Desafíos

Los padres y los niños están experimentando interrupciones importantes en su vida con la educación en el hogar durante el brote de la enfermedad por coronavirus. Muchos en casa y apoyan el trabajo escolar, una responsabilidad que no es fácil. Nadie les pide a los padres que actúen como maestros o que suministren las actividades y comentarios que una escuela haría. Los padres deben hacer lo que puedan para ayudar a los niños y apoyar el aprendizaje. Como resultado, la educación en el hogar enfrenta muchos desafíos.

Uno de los desafíos es aceptar la idea de que la escuela se ha convertido en un hogar y sin compañeros de clase. Algunos se divierten con sus padres, hermanos y hermanas, pero la mayoría echa de menos a sus maestros, amigos y vidas normales. Día tras día, los niños se aburren más y desean poder volver a la escuela para ver a sus amigos. 

Por otro lado, también tienen mucho miedo de contagiarse de coronavirus y tampoco quieren que sus amigos y familiares lo hagan. Estos pensamientos y preocupaciones ejercen una fuerte presión sobre los niños, que pueden verse afectados por la educación en el hogar.

Es importante recordar que la escuela no solo tiene una función educativa, sino también una función social para los niños. Al igual que los adultos, las relaciones de los niños con amigos están severamente restringidas por reglas de bloqueo. El desafío más serio que enfrentan los padres durante la educación en el hogar es la capacidad de equilibrar la asimilación física y mental de la información que recibe el niño.

Soluciones 

Jules White, profesor jefe de Tanbridge House School, dijo: “El gran aprendizaje solo ocurre cuando los niños se sienten felices, protegidos y protegidas. Deles a sus hijos confianza y amor." El lado positivo de estar en casa durante la pandemia de coronavirus es que los niños pasan tiempo con su familia y comparten con ellos lo que están aprendiendo.

Lo más importante es mantener un cierto grado de normalidad, en lugar de preocuparse por el progreso de un niño. Por lo tanto, los padres pueden establecer una rutina o un horario, establecer la hora del día para estudiar, mantenerse en contacto con la escuela y los amigos. El horario debe variar entre ejercicios, leer libros y aprender una nueva habilidad y mirar televisión y computadora con los padres.

"Si pueden mantenerse enfocados entre una hora y tres horas al día, sería fantástico". dijo el profesor Gillespie, del sistema educativo. Además, una de las mejores soluciones para los niños mientras estudia en casa es encontrar algo que les guste y aprender al mismo tiempo, por ejemplo, nadar, bailar, tocar un instrumento musical o practicar deportes.

Chatear con amigos es lo mejor de las redes sociales, pero también es importante estar bajo la supervisión y consideración de los padres y por horas limitadas. El tiempo en internet no debe pasarse pasivamente, puede ser creativo, educativo y puede proporcionar habilidades.

La pandemia de la enfermedad por coronavirus ha dañado la vida familiar en todo el mundo. El cierre de la escuela, la distancia física, es difícil para todos en la familia. Es normal sentirse preocupado, confundido, asustado o enojado.

La educación en el hogar es un proceso integrador entre el niño y sus padres para continuar aprendiendo y seguir siendo positivo. Será difícil para los padres mantener la educación de sus hijos de la mejor manera posible, pero ahora se están utilizando tecnologías para brindar lecciones a los niños.

"Es particularmente inspirador ver nuevas formas de trabajo emergentes, que van más allá de simplemente reemplazar las escuelas físicas con análogos digitales", dice Tracey Burns, de la Dirección de Educación y Habilidades de la OCDE. Hoy, debido a la pandemia de coronavirus, las cosas se ven muy diferentes.

Todos los aspectos de la vida cambiarán y uno de esos aspectos es la educación. Es nuestro deber ahora, como padres e hijos, continuar el proceso educativo al máximo.

Contenido publicado originalmente en Monitor Do Oriente bajo la Licencia Creative Commons. 

Traducido por Daniela Saavedra Rodriguez.