¿Es importante la investigación pedagógica en la formación docente?

En Colombia, la oferta de programas de formación docente es excesivamente amplia y heterogénea y — aunque algunos de ellos son de buena calidad —hay muy pocos programas que hacen énfasis en la práctica docente y la investigación pedagógica.

En países como Singapur, Finlandia y Canadá, que cuentan con altos desempeños estudiantiles en pruebas internacionales, la investigación pedagógica es un elemento central de la formación docente.

En el estudio ‘Tras la excelencia docente’ [1], de donde se toman las ideas de este artículo, se sugiere homogeneizar y elevar la calidad de los programas de pedagogía para que, entre otras acciones, promuevan la práctica y la investigación pedagógica.

Con relación a la formación en servicio, se proponen algunos ejes de acción: crear nuevos programas y transformar los programas de licenciaturas que no cumplan con estándares de excelencia en las prácticas y la investigación pedagógica.

Para llevar a cabo lo anterior, se plantea un esquema de subsidios a la oferta para los programas de formación de docentes que les permitan a los programas que quieran mejorar, contar con los recursos necesarios. Los subsidios se entregarían mediante concursos asesorados por un Comité de Expertos nacionales e internacionales de alto nivel.

El segundo paso es revisar y actualizar los estándares de acreditación de Alta Calidad por parte del Ministerio de Educación Nacional (MEN) para asegurar que en un tiempo determinado todos los programas de formación docente se articulen sobre la práctica y la investigación pedagógica.

El tercer paso es modificar los requisitos del Registro Calificado para los programas de licenciatura, de manera que coincidan, gradualmente, con los estándares de acreditación de alta calidad.

“Tener espacios para la investigación, además de las horas de clase y preparación, como una de las principales motivaciones para continuar en los colegios.”

Algunos de los maestros galardonados por el Premio Compartir mencionaron la posibilidad de tener espacios para la investigación, además de las horas de clase y preparación, como una de las principales motivaciones para continuar en los colegios.

Por otro lado, existen muy pocos espacios para el desarrollo de proyectos en los cuales los docentes sobresalientes puedan hacer innovaciones pedagógicas, en términos de investigación y de implementación de nuevas estrategias.

Esta limitación hace que, en algunas ocasiones, maestros sobresalientes (como los ganadores del PCM) terminen migrando a otros colegios o a otro sector.

Como parte de la actualización, los maestros pueden participar en posiciones de responsabilidad dentro del colegio, por ejemplo, colaborando con investigación pedagógica o participando en comités (Sclafani, 2008).

Finalmente, es importante destacar que, de acuerdo con algunos maestros, en los colegios de alto desempeño se han implementado experiencias de trabajo en proyectos de investigación con universidades, generando capacidades investigativas y de formación al interior de los establecimientos educativos para nuevas iniciativas.

Es así que en estos modelos de colaboración los estudiantes de pedagogía y los docentes trabajan integrando elementos de teoría, investigación y práctica para mejorar aspectos específicos de la labor docente (Collins y Tierney 2006).

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