Ambientándonos

Se dice que el medio ambiente es una estructura formada por elementos naturales y artificiales que están interrelacionados y que son modificados por el hombre. Desde este punto de vista, se trata del entorno que condiciona la forma de vida de la sociedad y en el cual se pueden incluir valores naturales, sociales y culturales que existen en un lugar y momento determinado. Es decir, no se trata solo del espacio en el que se desarrolla la vida, sino que también comprende a los seres vivos, objetos, agua, suelo, aire y las relaciones entre ellos.

Del mismo modo, la variación global del clima en la tierra, se debe a causas naturales y a las acciones del hombre, lo que produce diversas escalas de tiempo y sobre todo los parámetros climáticos, a esto se le llama cambio climático. La lluvia es necesaria para el crecimiento vegetal, pero en abundancia provoca ahogamiento de las plantas e inundaciones. El viento sirve para dispersión de polen y semillas, proceso benéfico para la vegetación, pero en demasía provoca erosión. La nieve quema las plantas, sin embargo, ciertas plantas lo necesitan para poder fructificar. La luz del sol que es fundamental en la fotosíntesis y para proporcionar calor, pero que en exceso genera sequía, lo que a su vez produce la esterilidad de la tierra

Por otro lado, se entiende que la educación ambiental es un proceso que dura toda la vida y cuyo objetivo es impartir conciencia ambiental, conocimiento ecológico, actitudes y valores hacia el medio ambiente para tomar un compromiso de acciones y responsabilidades que tengan como fin, el uso racional de los recursos y poder lograr así un desarrollo adecuado y sostenible.

Pero, es la intervención humana la que genera cambios significativos en el uso de los suelos, la destrucción de los bosques y otros hábitats naturales, la sobreexplotación de recursos, la contaminación química, lo que de una u otra manera nos conlleva al deterioro de nuestro medio ambiente. Y a consecuencia del cambio climático se observaba un incremento en las proyecciones sobre la frecuencia e intensidad de los eventos meteorológicos extremos, la desertización, el aumento de temperatura, la subida del mar, el deshielo, los incendios, la biodiversidad, entre otros,  son algunas de las consecuencias más preocupantes sobre el medio ambiente; provocando de esta manera fenómenos atmosféricos que  son cada vez más frecuentes e intensosen gran parte del mundo en desarrollo, lo que siguen afligiendo a las sociedades y obstaculizando el proceso de desarrollo.

He aquí la relación directa entre lo se debe tener claro, los escenarios de futuro son preocupantes, tanto por sus consecuencias en el medio ambiente como en la sociedad. El impacto que genera por el cambio climático irá en aumento sobre la gran mayoría de los sectores productivos como el turismo, la agricultura y la producción de alimentos. La salud, la calidad del aire, la energía, entre otros sectores, también tendrán influencia directa sobre este fenómeno.

El cambio climático global se convierte, entonces, en uno de los temas ambientales actuales de mayor relevancia, puesto que dicho fenómeno ha sido provocado en su totalidad por la emisión de gases de efecto de invernadero relacionado, como se había dicho antes, con las actividades humanas.

Además de la preocupación por la reducción de las emisiones de esos gases, la adaptación a las nuevas y esperadas condiciones climáticas por parte de la sociedad mundial y sus actividades productivas, ocupa el centro de interés de algunos gobiernos.

Sin embargo, el éxito de las medidas de adaptación impulsadas desde los gobiernos de algunos países está, entre otros factores, en función de la capacidad de adaptarse a las nuevas condiciones sociales y ambientales. No actuar rápidamente para detenerlo o para adaptarse a las nuevas situaciones que ya se están viviendo, sería una grave irresponsabilidad y conllevaría a escala global un incremento de las inversiones económicas para superarlo.

La lucha contra el cambio climático no sólo es un reto, sino que también puede entenderse como una oportunidad para propiciar un cambio en el estilo de vida que permita el desarrollo de un mundo más justo y equilibrado, donde los patrones de progreso se refieran a la solidaridad, la equidad, la cooperación, la participación, el respeto a los derechos humanos y la sostenibilidad.

Conscientes del actual deterioro ambiental y social, causado por las dinámicas económicas y políticas que han priorizado la producción industrial y la explotación de los bienes naturales, en Colombia se ha venido fortaleciendo la estrategia para promover la formación, sensibilización y educación en niños y jóvenes sobre el cambio climático, el cual debe ser el resultado de un trabajo  interinstitucional que comience con la creación y consolidación de acceso a la información, promoción de la participación ciudadana, creación de conciencia, capacitación, educación y cooperación internacional, es por  ello, que desde las instituciones de educación (en todos los niveles) se deben adoptar y empoderar acciones de participación que conlleve a la realización de campañas, eventos, jornadas de sensibilización, producción de materiales divulgativos, eventos académicos, en pro de mejorar y conservar un mejor ambiente.

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