La importancia de la educación musical

¿Cuáles son los beneficios psicológicos de cantar para el cerebro infantil?

Para nadie es un secreto que la voz en las personas es un instrumento musical. Basta con prender Spotify o abrir una canción en YouTube para darnos cuenta. Y no es para menos, pues con ella podemos emitir sonidos, hablar y cantar desde cortas edades. 

Aunque es bien sabido que tocar un instrumento aporta una serie de beneficios, hoy, desde Compartir Palabra Maestra, hablaremos por qué cantar y que nos canten es bueno para nosotros, cuáles son los beneficios en el cerebro de los pequeños y las ventajas psicomotrices de las tonadas desde temprana edad. 

Beneficios de cantar para el cerebro 

Las tonadas musicales ayudan ostensiblemente al desarrollo cerebral y le da un impulso al estimular una serie de habilidades que generan un mayor aprendizaje en los niños. Además de esto, una serie de investigaciones demuestran que escuchar canciones cantadas ayuda a bajar los niveles de estrés, influye en la mejoría de la concentración, impulsa a ser más creativos y fomenta el desarrollo psicomotor. Nada mal, ¿cierto? 

Pues buen, en este punto el cantar tiene mucho para aportar. De acuerdo con expertos e investigadores, la voz es una de las mejores herramientas que tiene el ser humano no solo para expresarse, sino para tener un mayor y mejor desarrollo cognitivo. El canto, fundamentalmente, es una herramienta que dispone el hombre para sus relaciones interpersonales. 

Si miramos la historia hacia atrás, desde nuestros antepasados que habitaron Europa, Próximo Oriente, Oriente Medio y Asia Central, entre 230 000 y 28 000 años antes del presente, hasta las tonadas más recientes de géneros musicales con beats urbanos y de hip hop, el canto ha tenido presencia en el desarrollo social. 

Ahora, el canto, adicional a ayudarnos a generar una conexión social, es una poderosa herramienta para los cerebros de los más pequeños y más aún si se aprende cómo cantar con el diafragma desde la edad más inicial. 

Si se logra esto, los beneficios son varios. Desde Compartir Palabra Maestra, hicimos un pequeño listado y resumen de ellos: 

• El cuerpo segrega las hormonas de la felicidad (endorfina, dopamina, oxitocina y serotonina), generando de esta forma un sentimiento de bienestar en quien cante. Según estudios realizados por neurobiólogos y fisiólogos, realizar esta acción reduce los niveles de cortisol, la hormona encargada del estrés que tantas afectaciones genera en el cuerpo a diario. Por eso cantar relaja y tranquiliza a los niños.
• Provoca la maduración. Un estudio realizado por investigadores en más de 500 instituciones infantiles de Alemania, arrojó que cantar y jugar cantando no solo ayuda al desarrollo físico, mental y social de los menores, sino que estimula el habla en los niños, su inteligencia social y el control de la agresividad. 
• Genera un aprendizaje más fácil. Cantar, como lleva tonadas y palabras, es una unión perfecta para que los dos hemisferios del cerebro trabajen, por consiguiente, se forman miles de conexiones neuronales en el mismo momento. Gracias a esto, se facilita la facilidad de recepción a nuevos conocimientos por parte de los niños. 
• Aumentan la atención y la forma de concentrarse. Usar el canto desde pequeños no solo activa el sistema cardiovascular, sino que se genera una oxigenación más grande en el cerebro, por consiguiente quien canta estará siempre más alerta y centrado en sus tareas cotidianas. 
• Un incremento en autoestima y confianza. Queridos lectores, cantar genera un enorme beneficio en la construcción de la identidad propia, ante todo si se hace en grupo, ya sea con familiares o en el aula de clase.