Tenemos claro que la web y el docente tienen papeles muy distintos, y justamente es el maestro quien debería estar en capacidad de guiar a los jóvenes en sus inmersiones digitales.
Dar alas a las palabras para que se desplieguen por la oración y vuelen a través de los textos para que los estudiantes comprendan la libertad del lenguaje.
La tecnología ya forma parte del día a día de muchas aulas e instituciones educativas, por lo que numerosos profesionales 2.0 adoptan de forma progresiva la transformación digital.