La construcción y continua re-construcción de nuestra Red Personal de Aprendizaje debería ser uno de nuestros principales objetivos como profesionales de la educación.
Concibo al maestro como la encarnación del modelo de ser humano de una sociedad mejor. Él encarna todos los valores que quisiera ver reflejados en una mejor sociedad.
Escribo estas líneas porque siento que la suerte del país está en nuestras manos, los maestros, los que le apostamos al poder transformador que tiene la educación.