La docente de lengua castellana en la Institución Educativa Julio Pérez ha aplicado este modelo para que los estudiantes entren en debate. Acá la historia.
Esta actividad posibilita abrir las puertas para que los alumnos juzguen y discutan con sentido crítico los problemas y situaciones cotidianas de sus comunidades y del país.
Esta clase de actividades posibilita el desarrollo intelectual de los niños, les ayuda a ser lógicos, a razonar ordenadamente y estar preparados para el pensamiento y la crítica.
Como todo acto educativo tiene su dimensión política y ética, esta actividad tuvo la meta de poner descubierto la necesidad de no dejar en otros las posibilidades históricas de nuestra misma existencia.
Logré vincular el aula y la comunidad rural a través de expediciones que marchaban tras la huella de la cultura local en tertulias de lectura que se convirtieron en lugares de encuentro entre los padres, los hijos, los textos y la escuela.