En las décadas recientes han circulado aires de renovación en el campo de la educación científica. La discusión es amplia y no apunta a un rejuvenecimiento de la enseñanza.
Se plantea la necesidad de que los docentes se organicen para reflexionar acerca de las prácticas pedagógicas y su relación con la vida de la sociedad.
Es trascendental hacer procesos de investigación en la enseñanza, que el docente se cualifique y logre establecer relaciones y compromisos, contribuyendo a que la acción pedagógica sea integral, incluyente y justa.
Abro una ventana a los niños con discapacidad para que puedan iluminar su curiosidad y ver con sus propios ojos la luz de la educación que hasta ahora solo veían por reflejos.