La escuela necesita un tiempo y un espacio de reflexión, donde se enseñe por medio de ambientes amables que permitan la exploración auténtica de las problemáticas.
Concibo al maestro como la encarnación del modelo de ser humano de una sociedad mejor. Él encarna todos los valores que quisiera ver reflejados en una mejor sociedad.
El siguiente artículo reúne algunas reflexiones en torno a la formación docente expuestas a través del diálogo con Karina Bautista y el autor del texto, quien es uno de sus estudiantes en el Diplomado de Currículo y Pedagogía que actualmente ella coordina en el Politécnico Internacional.