Vivir con la tecnología ya no es una aventura como tal porque la tenemos integrada en nuestro ADN. Ahora nos deslumbran con recompensas y adiciones diversas.
Abro una ventana a los niños con discapacidad para que puedan iluminar su curiosidad y ver con sus propios ojos la luz de la educación que hasta ahora solo veían por reflejos.
A pesar de los grandes avances en la tecnología, el continente africano tiene aún múltiples carencias en el acceso a Internet y el uso de herramientas digitales.