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Exploración, conservación, protección y rescate del patrimonio natural del Cañón del Chicamocha
Conozca cómo la maestra Mariana de Jesús Chaparro integra todas las disciplinas a través del aprender haciendo y de la investigación con sentido.
Mariana de Jesús Chaparro García
Año: 2017
Categoría: Maestro
Área: Multigrado
Región: Cepita, Santander
Institución Educativa: Colegio Pedro Fermín de Vargas
Desde hace 21 años que llegué a la institución, mi objetivo ha sido brindar una educación integral donde la formación no sólo sea académica, también permita que los niños sean críticos, investigadores y personas autónomas en su aprendizaje. Actualmente trabajo con escuela multigrado en el sector rural, con el programa de Escuela Nueva. Generalmente unifico aprendizajes por niveles o grados a través de proyectos de aula y secuencias didácticas. Esta propuesta la estoy desarrollando con los estudiantes desde preescolar hasta 5°.
Durante todo este proceso de prácticas y experiencias pedagógicas surge una auto-reflexión a través de las siguientes preguntas: ¿Cómo puedo contribuir para que mis estudiantes sean capaces de ayudar a solucionar problemas de la comunidad a través del análisis, comprensión e investigación sobre su entorno?, ¿Qué le puede aportar la escuela a este proceso?, ¿Cómo relaciono el aprendizaje en la escuela con lo que vive el estudiante en la comunidad y que éste sea significativo?
Siempre hemos trabajado en la huerta escolar con los estudiantes. En ocasiones los productos se utilizan para el consumo y otras veces los hemos aprovechado para que los niños trabajen comunitariamente, sepan administrar los recursos e integren las áreas de matemáticas con las ciencias naturales. Con este proyecto se busca reflejar estrategias de educación innovadoras, dentro de los procesos de enseñanza-aprendizaje. Por ello es necesario manejar habilidades para la implementación de actividades donde los niños interactúen directamente con su entorno, aplicando la interdisciplinariedad como objeto principal en los procesos del saber y el saber hacer. En este sentido cobra importancia la huerta escolar como escenario de desarrollo de competencias.
Cabe señalar que este saber hacer implica nuevas directrices en las prácticas educativas, ya que con esto dejamos de lado el constante hábito de trabajar dentro del aula, para explorar las riquezas del entorno. Los niños pasan a ser gestores de su propio conocimiento y aprendizaje. A partir del anterior planteamiento vimos la necesidad de cultivar plantas medicinales, es así como surgen los siguientes interrogantes: ¿Estamos enseñando y estimulando en los estudiantes las competencias que requieren para enfrentar con éxito la vida cotidiana?, ¿Cómo utilizar la huerta medicinal en los procesos enseñanza aprendizaje?, ¿Qué usos tiene la huerta medicinal en la adquisición de conocimientos en los estudiantes?
Al trabajar en la huerta medicinal, descubrimos un árbol que se llama el Jobo. Esta especie es utilizada en la región para limpiar la piel de barros y espinillas. También descubrimos otra planta (La Ceiba Barrigona) que es endémica del Cañón del Chicamocha, está en peligro de y podría ser el árbol emblemático de Santander.
En este proyecto trabajamos las diferentes áreas del conocimiento de manera secuencial. De esta manera los estudiantes investigaron en un contexto real sobre una problemática de la región como el peligro de extinción en el que se encuentra la Ceiba Barrigona, planta endémica del Cañón del Chicamocha y las plantas autóctonas que tienen muchas propiedades medicinales e industriales. Ahora, surge una pregunta más: ¿Cómo podemos rescatar la sabiduría de nuestros abuelos sobre el uso de la Ceiba Barrigona y el Jobo, plantas autóctonas de la región, los exploradores botánicos del cañón del Chicamocha?
En el siguiente año seguimos investigando las plantas endémicas del Cañón y descubrimos que la Zamia o Cacao indio también es única de la región. La metodología implementada ha sido de participación y acción dado que los estudiantes en todo el proceso son los protagonistas. Actualmente estamos investigando otras plantas y especies del Cañón del Chicamocha y seguimos haciendo el semillero de la ceiba barrigona. Conseguimos 350 ceibas y los niños están sembrándolas de acuerdo a las instrucciones que recibimos de una persona que tiene un vivero.
En el área de lengua castellana los niños escriben el texto instructivo sobre cómo hacer un semillero. Para ello hacen un primer borrador con la orientación de la profesora e investigando en libros y textos la superestructura. Finalizan con la elaboración del texto instructivo. Esta actividad se realiza con los grados de segundo hasta quinto. Diseñamos un programa radial como juego para presentarlo ante todos los compañeros. Ellos han aprendido a diseñar la entrevista para luego aplicarla. En este proceso investigan la superestructura de la entrevista y elaboran varios borradores hasta obtener un producto final. Para cada documento que se produce, se realiza este procedimiento. Han aprendido a elaborar mapas conceptuales y hacen la práctica en cada una de las áreas. Elaboran textos explicativos, descriptivos e informativos sobre cada una de las plantas que están investigando.
En ciencias naturales y sociales hemos estudiado los ecosistemas, los climas, el relieve de la región y lo comparamos con el del país. Además, hemos trabajado contenidos como la biodiversidad, los ecosistemas, climas y cuidado de la salud. En tecnología, instrumentos y herramientas que podemos utilizar en los experimentos, cuidado y conservación de la naturaleza. Aprendimos a destilar otras plantas aromáticas con personas expertas y a sacar aceites esenciales de otras plantas de la región, donde compartimos experiencias muy significativas como el trabajo cooperativo. También estudiamos los procesos de evaporación, condensación y destilación que se presentan en los procesos químicos de los estándares de biología.
En el área de matemáticas vamos registrando en una tabla de datos el crecimiento en centímetros de la planta por semanas, observamos el orden o secuencia del proceso de crecimiento y hacemos comparaciones y las registramos en los diagramas de barras. En informática y tecnología aprendemos a hacer los diagramas de barras y las tablas de registro. Además de ello, nos familiarizamos, aprendemos y acercamos al uso de la herramienta en cada una de las prácticas de siembra. Por otra parte, en la huerta escolar sembramos tomate orgánico. Para el control de plagas estamos utilizando el orégano, planta autóctona y abundante en la región que hemos investigado con el fin de evitar la contaminación del suelo y el aire con productos químicos. Así mismo fomentamos el uso de los medios que ofrece la naturaleza, sin abusar de los recursos naturales. También elaboramos diapositivas con la información recopilada y allí los niños, a través de su creatividad, diseñan y exponen el proceso de investigación a los demás compañeros. De esta manera estamos relacionando todas las áreas, incluso artística, porque utilizan diferentes materiales del medio para elaborar una maqueta y, en ética y valores, aprenden a conservar y proteger el medio que les rodea.
La Creación de un grupo llamado héroes del Chicamocha en redes sociales (Facebook) se desarrolló con el fin de promover, mediante la comunicación visual y auditiva, la protección del patrimonio natural del Cañón del Chicamocha. Esta página ha sido muy bien acogida y ha generado participación de la comunidad rural. Además, tenemos un blog donde publicamos todo lo relacionado con los proyectos y producciones de los estudiantes de la institución.
Con este proyecto nos presentamos en ‘Generación Conciencia’ de la Universidad Autónoma de Bucaramanga (UNAB) y clasificamos a la feria departamental. Visitamos el Jardín Botánico de Floridablanca y allí nos donaron 50 colines de la Ceiba Barrigona con el fin de crear un plan padrino, que consiste en fomentar la siembra de esta especie dentro de la comunidad. De esta manera las personas se animan a sembrar en su finca una o dos ceibas, las cuidan y las conservan. 50 personas de la comunidad apadrinaron una ceiba contribuyendo así a su conservación.
Por otra parte, hemos intercambiado conocimiento con semilleros de la UIS, que también están estudiando algunas plantas del Cañón del Chicamocha. Ellos han venido a dar talleres sobre cultivos invitro del orégano para conservar la especie, las aves que llegan a esta planta y la reproducción de la mosca de la fruta en extracto de aceite esencial del orégano. Allí conocimos el ciclo de vida de la mosca y las transformaciones que sufre en su crecimiento. Cada uno de estos temas los vamos profundizando y los niños comparten lo que aprendieron con otros niños de los grados de preescolar y primero de la sede A.
Así mismo, el quehacer investigativo y la conceptualización sobre determinado tema brindan a los estudiantes conocimientos con sentido construidos por ellos mismos, lo que permite que las prácticas pedagógicas se transformen en acciones significativas para y desde su realidad. El planteamiento de una serie de preguntas al estudiante le sirve como guía para que pueda realizar indagaciones sencillas que lo lleven a descubrir y a redescubrir. Ha sido una experiencia agradable para el estudiante porque le permite explicarse los hechos y fenómenos naturales que ocurren en su entorno. De esta manera la ciencia se puede concebir como una experiencia cotidiana que ayuda al docente y al estudiante a encontrar el sentido de las cosas.
Como maestra, este proyecto de investigación me ha permitido enriquecer mi quehacer pedagógico y ver de una manera distinta mi profesión. En otras palabras, en mi desarrollo personal y profesional he adquirido un gran aprendizaje, puesto que he podido reflexionar y analizar mi propia práctica pedagógica, elegir qué enseñar y cómo enseñarlo.
Este proyecto ha sido muy significativo para la comunidad educativa porque hemos intercambiado conocimiento con semilleros de distintas universidades. La enseñanza por descubrimiento de un aprendizaje significativo implica que el estudiante se apropie de su aprendizaje, donde la acción y el hacer es lo más importante. El estudiante tiene la oportunidad de desarrollar competencias científicas y académicas en investigación, discutir con expertos e integrar su proceso de investigación a su proyecto de vida. De esta manera el aula se convierte en laboratorio de construcción y reconstrucción de conocimientos científicos.
Imagen es.wikipedia.org
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