Gymkanas en la naturaleza: 4 ideas para realizarlas y disfrutarlas

En varios momentos del año, tanto niños como adultos disfrutan de la naturaleza, ya sea en una salida pedagógica, realizando algún tipo de ejercicio o simplemente jugando. Unas actividades muy populares y divertidas que pueden realizarse de manera sencilla cuando salimos son las gymkanas en la naturaleza. 

Estas consisten en juegos en los que formamos bandos y vamos resolviendo diferentes pistas o juegos a lo largo de un recorrido establecido. Gracias a esto, los estudiantes no solo desarrollarán el trabajo en equipo, sino que, además, trabajarán las relaciones personales y las inteligencias múltiples.

Hemos recopilado cuatro juegos para realizar una gymkana.

Gymkana para recolectar

La dinámica de este primer juego se basa en recoger diferentes objetos presentes en el lugar en el que estemos disfrutando. Hojas, piedras o palos son algunos de los objetivos con los que podemos trabajar durante el juego. Otra forma de aplicar esta gymkana es animar a los participantes a que recopilen objetos que pudieran ser útiles para sobrevivir cuando no estemos en casa, impulsando, de esta forma, que desarrollen su imaginación.

Gymkana con imágenes

Para realizar esta gymkana es indispensable que un adulto, sea un padre de familia o un maestro, se encargue de realizar previamente al juego una serie de fotos en diferentes puntos clave del recorrido donde, además, se dejará una pista en forma de letra. Una vez tomadas e impresas las imágenes, los estudiantes recibirán un correo con ellas y deberán buscar el lugar exacto al que corresponde la foto. Según vayan avanzando, los estudiantes conseguirán las diferentes letras, las cuales tendrán que organizar para formar una palabra final. Cuando los estudiantes descubran la palabra, será el momento de buscar ese objetivo y entregarlo al líder para dar por completada la actividad.

Gymkana de 5 sentidos

Con el objetivo de estimular al máximo los cinco sentidos que posee el ser humano: olfato, gusto, vista, tacto y oñido, esta actividad recoge diferentes pruebas que buscan desarrollarlos. Para ello, los estudiantes deberán superar algunos retos basados en la llamada estimulación sensorial. Para el tacto, por ejemplo, deberán introducir sus manos en una caja de cartón y, con los ojos vendados, adivinar qué objeto están tocando. Acá podemos usar algodón, cuero, peluza, etc. Después, tendrán que oler varios objetos, que pueden ser plantas aromáticas o esencias, para adivinar cuál de ellas es, desarrollando así este sentido. La vista se estimulará animando a los estudiantes a buscar un objeto de su alrededor de un determinado color y el oído, por ejemplo, lo podemos desarrollar descubriendo e identificando el mayor número de sonidos de animales. Acá podemos usar YouTube o Spotify. Para finalizar la gymkana y estimular el último sentido, el gusto, el premio puede ser un postre para terminar el ejercicio. 

Gymkana a la antigua

Otra forma de realizar esta actividad con los estudiantes, es combinar diferentes juegos que servirán de hilo conductor en el ejercicio. Podemos comenzar, por ejemplo, con una carrera de bolsas en el cual los alumnos tendrán que enfrentarse hasta llegar a una meta establecida. Después, llegaré el turno del pañuelo para que los participantes desarrollen los reflejos y consigan tomar el objeto más rápido que sus compañeros rivales. A continuación, deberán estimular la capacidad de equilibrio transportando un huevo con una cuchara en la boca, sin que el mismo se vaya al piso. Al final, para terminar, los estudiantes pueden jugar al escondite, aprovechando el espacio exterior. 

^{_{Imagen Katherine Hanlon on Unsplash}}