La pandemia nos ha dejado lecciones después del gran impacto que ha tenido para los maestros, administradores, estudiantes y padres.
En la vida hay algunas verdades. Una de estas es que para ser exitoso, muchas veces hay que fallar primero.
Independientemente de donde se encuentre un estudiante en su aprendizaje, es un deber desafiarlo a través de experiencias relevantes.