El amor, esfuerzo y dedicación hacen parte del quehacer cotidiano de un excelente docente para poder formar ciudadanos críticos, sociables y llenos de valores.
Diseñando artefactos para resolver problemas de la vida cotidiana los estudiantes desarrollan su creatividad, su pensamiento tecnológico y aprenden el valor del trabajo en equipo.
Dormir bien, buena alimentación y ejercicio periódico parecen ser las claves de una vida saludable, por tanto, los centros de desarrollo infantil deben propender por el desarrollo de los mismos.