Tengo 18 años, soy una maestra en formación, cuando estaba en el colegio no sabía qué quería estudiar, pero un día de labor social descubrí mi gusto por ser maestra y enseñarle a niños.
Enseñar y ser un buen maestro requiere de un conocimiento amplio de una materia, plan de estudio, amor por lo que hace y sobre todo una excelente actitud frente a los retos que encuentre.
Uno de los temas más interesantes al que podemos enfrentarnos como maestros lo constituye la reflexión sobre el juego infantil y cómo influye en facilitar el trabajo en el aula.
El docente Pedro Antonio Montero narra su experiencia con el Premio Compartir, ya que este año no es la primera vez que se encuentra entre los nominados. Su testimonio da cuenta de su dedicación y creatividad en su labor pedagógica.