Un proyecto entre todos

 

Sandra Milena Pérez Amariles
Año: 2017
Categoría: Maestro 
Área: Educación inicial                      
Región: Abejorral, Antioquia
Institución Educativa: Escuela Normal Superior De Abejorral

La Escuela Normal Superior de Abejorral cuenta con el grado preescolar, conformado por niños y niñas en edades que oscilan entre los 5 y 6 años, quienes poseen habilidades y competencias propias según su edad y nivel de formación, a su vez, dentro de su contexto familiar los padres de familia en su gran mayoría han alcanzado estudios profesionales, los cuales se ven reflejados en las formas de actuar y relacionarse con los demás, sin embargo, sus múltiples ocupaciones laborales no les permite un acompañamiento eficaz a sus hijos desde lo académico, social, familiar, así como la participación en eventos recreativos y lúdicos que les permita a los niños potenciar sus habilidades artísticas y deportivas.

Lo anterior, sugirió varios interrogantes como: ¿Cómo aprovechar los talentos de los niños y niñas, además de la profesionalización de los padres de familia?,¿Qué actividades se pueden implementar con los estudiantes para que se sientan motivados y felices?, ¿Cómo generar espacios de convivencia y reconciliación?, ¿Que estrategias se pueden utilizar en pro de una comunicación asertiva con los padres de familia y que permitan la participación de todos en las actividades propias del aula?, ¿Cómo fortalecer  el espíritu científico, matemático y literario desde temprana edad?, ¿Cómo hacer que el cuento sea una actividad que fomente el interés por la lectura?, ¿Qué actividades desarrolla competencias cognitivas, comunicativas, corporales y socio afectivas en torno a los ser, hacer y saber hacer?, ¿Cómo se relacionan los niños y niñas con los adultos?

Estos y muchos otros interrogantes fueron indagados y analizados a lo largo de varios días a través rastreos bibliográficos, específicamente aquellos relacionados con la primera infancia, uno de ellos la propuesta de Carmen Ibañez Sandín (1992), El proyecto de educación infantil y su práctica de aula, donde se resalta la importancia de enseñar a los niños y niñas a ser felices.  A su vez, reconoce que “tener un estudiante líder resulta enormemente motivador y enriquecedor tanto para los niños como para los profesores”[1]  

Luego de tener algunas claridades a las preguntas anteriormente escritas y en relación con la propuesta de Sandín (1992) se da pie a pensar e implementar una propuesta que permitiera no solo el trabajo con los niños sino la posibilidad de integrar la familia a los procesos educativos, en especial los padres de familia y /o acudientes, puesto que son ellos los directamente responsables del cumplimiento y protección de los derechos de los niños y niñas, es así como se implementa en el año 2013 “UN PROYECTO ENTRE TODOS”, el cual se ha venido desarrollando a partir de la implementación de actividades lúdico recreativas en torno a procesos lecto escriturales donde ha sido vital la estrategia del Plan Nacional de Lectura y Escritura: Leer es mi Cuento.

El objetivo de este proyecto es fortalecer las competencias comunicativas, cognitivas, corporales y socio - afectivas en los niños y niñas de la Escuela Normal Superior de Abejorral, participando todas las personas que lo rodean, esto con el fin de que los niños se sientan valorados en su individualidad y al mismo tiempo como miembro de un grupo demuestren sus capacidades y competencias no solo académicas sino artísticas y en las cuales su núcleo familiar es un órgano vital para esta formación.

El proyecto en asignarle un botón a un estudiante, que lo identifica como líder o personaje, se inicia con las maestras y luego en su orden de lista alfabético los niños y las niñas.  Durante el tiempo que dure el protagonista (una semana), se resaltan y valoran las actividades diarias, gustos, preferencias y creencias, generando confianza en sí mismo y en sus capacidades. Cada día y cada espacio se convierte en un momento significativo no solo para su formación y el crecimiento de su autoestima sino que permite afianzar lazos de confianza y respeto por sus compañeros, padres de familia y demás adultos que rodean al líder, en este caso, los niños y niñas.

El desarrollo del proyecto se hace en 5 momentos, los cuales al culminar la semana se socializan a todo el grupo las experiencias, logros, dificultades, retos, conclusiones y puntos a mejorar.  Estos son:

Momento 1: Se solicita escribir una actividad o juego para saludar a los compañeros, luego compartir la historia personal la cual es consignada  en el cuaderno grupal, pues es una ayuda para que los niños y niñas puedan narrarla en forma detallada como especificando el lugar, la hora, y las personas que le acompañaban. 

Momento 2: Se invita al niño líder a compartir su juguete preferido y a su vez resaltar los mejores compañeros y con los cuales casi no tiene contacto diciendo el por qué.  En este espacio el público entabla un dialogo en donde describirán su forma física la cual quedará plasmada en un dibujo.

Momento 3: El líder comparte una degustación de su comida favorita, a la vez dirá su color preferido, programa de televisión que más le agrada ver, deporte que practica, lugar donde le gusta ir, personas con quien más le gusta estar y por último, lo que  más disfruta de su  vida.

Momento 4: Iniciando la semana, los niños eligen un cuento, y en este espacio ellos lo socializarán a sus compañeros de una manera creativa, de tal manera que se pueden demostrar las expresiones artísticas que posibiliten a los oyentes atención e interés para escucharlo.

Momento 5: Los padres se hacen participes en el aula de clase compartiendo historias y anécdotas de su hijo, por otro lado se invita a compartir de él mismo algunos aspectos importantes cuando era niño como su juego preferido, comida u otros detalles significativos.  En este último día, además, se realiza la evaluación de la semana, en donde los compañeros resaltan los aspectos positivos y a mejorar, y la realización de preguntas que durante cada día se generaron en relación con el líder.

La realización de este proyecto pretende conseguir un espacio de comunicación interesante para el niño como emisor y el niño como oyente, además de los miembros de la familia con la docente,  desarrollando cada una de las competencias comunicativas, cognitivas, corporales y socio afectiva.  En este sentido, es de gran importancia el acompañamiento familiar, puesto que son ellos los responsables en los procesos de formación de sus hijos, y el proyecto en cada actividad da la posibilidad  de que el niño en compañía de su familia realice socialice las actividades en clase.

Al analizar los resultados se pueden percibir grandes logros y aprendizajes significativos, primero, la motivación, anhelo e interés que los niños y niñas muestran en la semana, puesto que ellos se sienten importantes dentro del grupo y se reconocen como los maestros de la clase; segundo, la disponibilidad y compromiso de los padres de familia en el acompañamiento de cada una de las actividades que los niños realizan, pues acá se demuestra el deseo por fortalecer el proceso de desarrollo de sus hijos en todas sus dimensiones y tercero y último, los docentes, quienes en cada semana les queda la satisfacción y la felicidad de ver que este espacio no solo es una actividad más, sino un espacio para el fortalecimiento de la relación escuela – familia, donde lo principal la formación de niños y niñas felices.

Son muchos los impactos que se generan en la realización del proyecto, uno de ellos y aplicando la teoría de Gardner “no todos los niños aprenden igual”[2], se da la oportunidad de conocer cada una de las capacidades estudiantes, sus gustos, intereses, habilidades y demás características propias, así mismo, la integración de los padres de familia y/o acudientes, pues el compromiso que se adquiere con cada momento rompe los muros de la escuela y la familia, pues acá el contacto y dialogo constante con la docente y el acercamiento con los demás niños, fortalece lazos de fraternidad y confianza y por último es un espacio resaltar los aspectos positivos  y a mejorar, es el momento para expresar y desahogar con libertar sus sentimientos y formas de vida.

Se puede concluir entonces, que el proyecto permite generar nuevas estrategias a partir de la conjugación de ideas y preceptos que forjan un modelo de  existencia, en donde niños y niñas, padres de familia, y maestros denotan las percepciones a través gestos, palabras, y diálogos, los cuales redundan en una comunicación asertiva entre la escuela, la familia y comunidad educativa donde se desenvuelve el niño.