Cuando se trabaja para los niños el reto es constante. Debemos tener presente que es un público exigente que tiene la capacidad de sorprenderse y entusiasmarse cuando algo le interesa.
Ya casi nadie se sorprende con los resultados de aprendizaje que muestran las evaluaciones internacionales como PISA. ¿Por qué? Descúbralo en este texto.
Cualquier persona que se sienta comprometida con la calidad de la educación, puede ejercer un rol de liderazgo que impulse los cambios necesarios para mejorar los aprendizajes.
No deben reforzar los estereotipos de que los niños son mejores en STEAM que las niñas: la socialización debe ser igual para ambos para no influir en la formación de la identidad.
La tecnología desarrollada como herramienta educativa es efectiva, pero por sí sola no puede solucionar la totalidad de los problemas que aquejan a los estudiantes.
Invertir en educación a lo largo de todo el ciclo de vida es el objetivo, y la clave para obtener un mejor retorno de la inversión es la educación temprana.
Los datos del programa PISA señalan que los niños tienden a tener mejor desempeño en matemáticas y ciencias que las niñas, mientras que a las niñas les va mejor en lectura y lenguaje.