El Pensamiento de Diseño o Design thinking es una metodología, aplicable en el aula, para la resolución de problemas o para abordar diferentes desafíos por medio de soluciones que responden a las necesidades reales de las personas, favoreciendo y promoviendo la empatía, la intuición, la creatividad y la generación de ideas innovadoras.
Esta práctica favorece el desarrollo de competencias para la resolución de problemas mediante el trabajo en grupo, de forma creativa, pues tanto maestros, estudiantes y la comunidad educativa en general “aprende haciendo”.
Conscientes de esto y de la importancia del trabajo colaborativo en la coyuntura mundial actual, desde Compartir Palabra Maestra hemos desarrollado este Especial Temático en el que actores del sector darán opiniones, prácticas educativas y diferentes herramientas para poner en práctica el Design thinking dentro y fuera del aula.
Dotado con notas Post-it y Sharpies, las compañías están reinventando cómo hacen lo que hacen. ¿Pero qué hay de las escuelas? ¿Qué hay de los estudiantes?
Dichos retos que enfrentan los educadores son reales, complejos y variados, y requieren de nuevas perspectivas, herramientas y estrategias. Esta es una de ellas.
Maestros alrededor del mundo están implementando en sus clases el Pensamiento de Diseño con el objetivo de innovar y generar nuevos contenidos para sus estudiantes. Descúbralo aquí.
Desarrollé una fórmula química que permitió a los alumnos combinar los elementos claves para fundir la ciencia con su vida cotidiana sin confundir los enlaces para su futuro.
Este curso impartido por la Universidad de los Andes y que durará 30 horas certificadas, está ofreciendo becas de formación para la comunidad de Compartir Palabra Maestra. Postúlese aquí.
Comencé una nueva clase en secundaria este año. Es una clase de diseño e innovación que se supone ayuda a los estudiantes a explorar la solución de problemas y la capacidad de pensamiento crítico. Una de las cosas que quería explorar realmente era una clase libre de calificaciones. Estaba nervioso por cómo se vería esto porque nunca he hecho algo así antes y estaba asustado por cómo los estudiantes y los padres reaccionarían, pero me sorprendió descubrir que el mundo no se acabó.
Nicholas descubrió que es difícil romper los viejos hábitos educativos. Él y sus estudiantes determinaron acogerse a una política de ‘no tarea’ fuera del horario académico. ¿Cómo resultó?
Los participantes generarán soluciones para la formación en el campo, en el marco de una competencia entre grupos, la cual será guiada por expertas en innovación educativa.