El papel del directivo es quien, sin protagonismo o afán de figurar, propicia sanos ambientes de convivencia, anima el trabajo colaborativo y estimula el trabajo en equipo.
El camino de la seguridad alimentaria es el primer paso para romper la inequidad social, asegurando, en primer lugar, el acceso a la educación en igualdad de condiciones a todos nuestros niños.
Ofrezco a cada uno de los alumnos un lápiz mágico y los invito a escribir su propia historia enmarcada en los cuentos y leyendas de su cultura indígena.
Sin menospreciar la experiencia de la virtualidad y las enormes bondades de las tecnologías digitales, éstas jamás reemplazan el lugar de la escuela en su componente relacional y como un segundo hogar.
Ir a la escuela es decidirse a tomar el mundo en nuestras manos, es tomar el reto de ser parte de una escritura conjunta que nunca termina, es sentirnos placenteros navegantes del lenguaje.
En la escuela circulan todos los discursos y es la escuela el escenario ideal para escudriñarlos e interpretarlos. Que no se nos pida permanecer callados.
No hagamos más parte de la quejadera, hagamos parte de las soluciones que el país reclama. Unas soluciones que tienen su raigambre en la cobertura y la calidad educativa.