Ofrezco a cada uno de los alumnos un lápiz mágico y los invito a escribir su propia historia enmarcada en los cuentos y leyendas de su cultura indígena.
Un factor que, si lo lográramos, cambiaría la ecuación del aprendizaje; de la misma forma en que confirmaría la existencia de una partícula fundamental, una gran teoría del universo.